viernes, 23 de septiembre de 2011

Freddie Mercury y Mary Austin - parte 3

Cuando Freddie Mercury le dijo por primera vez a su antigua novia, Mary Austin, que deseaba dejarle su majestuosa mansión Georgiana en el barrio londinense de Kensington, su reacción inmediata fue de sorpresa, y después temor. De hecho, le aterrorizaba tanto el asumir tan enorme responsabilidad que intentó convencerle de que destinara la casa, con su hermosa colección de mobiliario antiguo y pinturas, a una fundación como museo.

Freddie consideró esta opción, pero decidió que quería que Mary (su amante durante seis años) tuviese algo permanente en su vida. No sólo le dejó su mansión, que se alza tras un amurallado jardín japonés, sino también la mayor parte de su multimillonaria fortuna, con un ingreso de por vida procedente de sus enormes ventas de discos.



Mucho antes de que Freddie le dijera a sus amigos íntimos o a sus compañeros de banda: "Queen", que tenía SIDA, le confió su secreto a Mary.

Desde aquel momento ella estuvo allí cada día para intentar consolarle mientras su salud se deterioraba. Cuando comenzó a perder la vista y su cuerpo se volvió tan débil que no podía ni tan siquiera levantarse de la cama, Freddie decidió enfrentarse a la muerte rechazando tomar la medicación. "Fue la decisión de Freddie acabar con todo ello, él eligió el momento de morir", recuerda Mary en un susurro. "Él sabía que el final estaba cerca, que estaba más cerca de lo que jamás había estado antes, y de repente dijo: 'he decidido que me tengo que ir'".

"La calidad de su vida había cambiado tan dramáticamente y sufría más dolor, cada día. Estaba perdiendo la visión. Su cuerpo cada vez más débil, al tiempo que sufría pequeños espasmos. Era tan angustioso verle deteriorarse de esa forma. Un día decidió que ya era bastante y abandonó todas las ayudas médicas que le mantenían con vida. Simplemente dejó actuar a la naturaleza. Lo sobrecogedor para mi fue su increíble valentía. Miró a la muerte a la cara y dijo 'está bien, lo aceptaré, me iré ahora' Pero fue algo tranquilo y murió con una sonrisa en su cara".
Su muerte dejó un vacío en su vida. "Perdí a alguien a quien creía mi amor eterno. Cuando murió sentí que habíamos tenido un matrimonio. Habíamos vivido nuestros votos. Habíamos permanecido juntos en los buenos tiempos y en los malos, en la riqueza y en la pobreza. En la salud y en enfermedad. No podrías haberte separado de Freddie hasta que hubiese muerto, incluso entonces, ha sido difícil".

Freddie vivió con el conocimiento de que era VIH positivo durante siete años. Murió a los 45 años de una neumonía inducida por el SIDA.

En su testamento, legó el 50% de toda su fortuna y de los ingresos futuros a Mary. Sus padres y su hermana recibieron un 25% cada uno. Aparte de eso, dejó 500.000 libras a Jim Hutton y le compró un terreno en su lugar natal, Irlanda, en el que pudiese construir una casa. También les dejó 500.000 libras tanto a su ayudante personal Peter Freestone como a su cocinero Joe Fannelli. Y 100.000 a Terry Giddings, su chofer y guardaespaldas.

Tras su muerte, el 24 de Noviembre de 1991, Mary se mudó a su palaciego hogar, pero mientras deambulaba por sus enormes salones, rodeada de los tesoros de Freddie sus sentimientos eran de confusión y soledad. Mary Austin dice: "Fue la época más solitaria y difícil de mi vida tras la muerte de Freddie. Sabía que tendría problemas al hacer frente a su muerte y a todo lo que me dejó. Lo mejor era que yo misma pudiese salir de aquella situación".

Mary, que había crecido en una modesta casa de Fulham, al oeste de Londres, se encontró con que había mucho a que hacer frente; la responsabilidad de la casa con su personal, y el hecho de encontrarse de repente con una enorme fortuna. Hubo algunas complicaciones con el testamento, y a algunos de los parientes y amigos de Freddie les molestó que le dejara tanto a ella.

"Siempre tenía a Freddie para ayudarme, y él siempre me tenía para ayudarle, si lo necesitaba. De repente no había nadie para ayudarme. Me hizo darme cuenta de que no era tan autosuficiente como me hubiera gustado ser. Así como yo había sido una amiga para él, me di cuenta de lo que había significado su amistad para mi- el hecho de simplemente saber que él estaba allí".

"Siempre me protegió mucho. Sólo me di cuenta tras su muerte de lo protector que había sido conmigo. Si algo malo ocurría él decía 'oh, cariño, no te preocupes, lo superaremos'. Siempre era optimista. Otras veces, cuando era consciente de que tenía SIDA y sólo tenía un tiempo limitado de vida podíamos tener alguna conversación seria, cuando me decía "ven y siéntate, no sabemos cuanto tiempo nos queda".
Mary hizo frente a la enorme generosidad de Freddie convirtiéndose en una reclusa dentro de los seguros muros de su casa. "Me sentía fuera de mi sitio, realmente", explica. "El personal de Freddie había sido como una familia para mi, pero tras su muerte la mayoría de ellos se marcharon, porque él había sido muy generoso con ellos. Pasé noches sin dormir preocupándome por todo. Sentía como si hubiera hecho algo malo y me volví un poco paranoica. Algunos fans incluso me dijeron que yo sólo era el guardián de la casa. Eso duele. Sé que a algunos de los amigos gay de Freddie les sorprendió que me dejara tanto. Había algunos que pensaban que les tenía que haber dejado la casa a ellos. Es como si la gente estuviera resentida conmigo por lo que me dejó".

En contraste con el extravagante ídolo del rock, Mary, de 48 años de edad, es tímida y da la impresión de carecer de cualquier confianza en sí misma. Pequeña y delgada, de ojos verdes y pelo rubio. "Ciertamente no soy ninguna académica", dice, al tiempo que uno de los gatos exóticos de Freddie se le une en el profundo sofá de color rojo oscuro. Mary ha mantenido la decoración y el mobilario tal como estaban cuando Fredde murió. "Tenía un estilo impecable, así que ¿por qué cambiarlo?", dice.



Sólo Mary sabe donde fueron finalmente colocadas sus cenizas. Le dio a ella la responsabilidad de encargarse de ellas y le hizo prometer que nunca revelaría donde fueron enterradas. "No quise saber nada de ellas", admite abiertamente. "Las dejé en la capilla ardiente durante un tiempo. Sabía que tenía esta responsabilidad, pero no encontraba valor para deshacerme finalmente de él. Tenía que hacerlo sola, tal como me lo pidió, y mantenerlo en secreto. Eso fue algo que no mejoró el aprecio de su familia por mi".
"Encontré todo aquello un poco siniestro. Estaban en una bolsa de plástico dentro de una urna. Después tuve que juntarlo todo. Pensé 'realmente me has dejado demasiado para hacer, Freddie' ".

Aunque Freddie murió en 1991 tuvieron que pasar 8 años para que recibiese la mayoría de su herencia. "Fue una época preocupante", dice, "los impuestos habían sido pagados, pero al no recibir el dinero no sabía si me podría permitir el mantener la casa. Me sentí bajo mucha presión".

La vida de Mary hoy día está lejos de ser una lucha. Comparte su majestuosa casa con Nick, el empresario londinense de 48 años con el se casó hace dos años. Sin decírselo a nadie, se casaron en Long island con sólo sus dos hijos, Richard y Jamie, como testigos. "Creo que Nick fue muy valiente al hacerse cargo de mi. Traigo mucha carga conmigo, un enorme capítulo de mi vida. En un principio, debido a mi pasado y la cantidad de rupturas que he tenido no estaba muy segura respecto al matrimonio. Después alguien me dijo 'no lo sabes hasta que no lo intentas'. Pero conforme el tiempo pasa, ahora puedo ser feliz con él. Sé apreciar lo que tuve, y lo que tengo ahora, y sigo hacia adelante. Creo que sólo lo podría haber conseguido conociendo a alguien".

"Al conocer a Nick, todo se arregló mucho más deprisa. Quería estabilidad para mi y para mis hijos. Sentía que este hombre nos daría eso-estabilidad en un sentido familiar. Realmente había perdido a mi familia cuando Freddie murió. Incluso la gente que trabajaba para él en la casa eran mi familia, pero todos se marcharon. Freddie lo era todo para mi, aparte de mis hijos".

Mary es también administradora de la fundación de lucha contra el SIDA establecida en nombre de Freddie, la Fundación Phoenix, establecida en Montreux, Suiza, donde Queen tienen sus propios estudios de grabación. Como fue un showman tan vital y enérgico, le pregunté a Mary si quizás fue mejor que no llegara a envejecer. Sorprendentemente me respondió "no, hubiera preferido que hubiese ocurrido al contrario. Yo tendría que haberme ido primero. Hubiera preferido que fuese él quien tuviera que echarme de menos, en lugar de tener yo que echarle de menos".



Fuente: Daily Mail (Enero 1999
Archivo imágenes: Fred Mercurio

martes, 20 de septiembre de 2011

Freddie Mercury y Mary Austin - parte 2


Freddie y Mary Austin 70's y 80's

Fue después de haberse mudado a su segundo piso, en Holland Road, cuando Mary comenzó a sospechar que algo iba mal en su relación de seis años. "Incluso aunque yo no quisiera admitirlo plenamente, me había dado cuenta de que pasaba algo. Aunque no sabía lo que era decidí discutirlo con Freddie y se lo dije. 'Algo pasa y me siento como una soga alrededor de tu cuello. Es hora de que me marche'. Pero insistió en que no pasaba nada. Luego su vida alcanzó un ritmo vertiginoso tras el éxito de los albumes y los singles".
"Las cosas nunca volvieron a ser iguales. Nuestra relación se enfrío. Yo sentía que evitaba cualquier confrontación conmigo. Cuando yo volvía a casa del trabajo él no estaba. Siempre llegaba tarde. La situación era obvia. Simplemente ya no estábamos tan juntos como lo habíamos estado".

Cuando Freddie se convirtió en una celebridad internacional, Mary pensó que lo perdería por culpa de otra mujer, pero nunca por un hombre.


Pero llegó el día en que Freddie le comunicó que tenía algo importante que decir, algo que cambiaría su relación para siempre: "Él dijo, 'creo que soy bisexual', yo le dije 'creo que eres gay'. Y no se dijo más. Sólo nos abrazamos. Pensé que había sido muy valiente. Como soy un poco ingenua me llevó bastante tiempo darme cuenta de la verdad. Después, él se sintió bien por habérmelo dicho. Me dijo 'era consciente que tenía otra alternativa, no decírtelo, pero creo que tienes derecho a tener tu propia vida'. Y pensé 'sí, al igual que tú tienes derecho a la tuya' " (Mary Austin).

Mary Austin decidió que era hora ya de marcharse, pero Freddie insistió en que no debía alejarse mucho de él. "Con el tiempo encontramos una casa cerca de donde él vivía, que quería que yo me quedara. Era perfecta para una persona soltera como yo. Su empresa discográfica me la compró por 30,000 libras. Podía ver el piso de Freddie desde mi cuarto de baño. Pensé, 'oh, nunca me voy a escapar'. Pero no me importaba. Era muy feliz allí. Era pequeña, pero me gustan los lugares pequeños. Mi familia era muy pobre. Éramos cinco y mis padres lo pasaban realmente mal para llegar a fin de mes. La vida siempre fue una lucha para ellos" (Mary Austin).

A Freddie le emocionó tanto como a ella la llegada de su primer hijo y solía visitarla en el hospital. Enseñó al pequeño a decir sus dos primeras palabras 'tractor' y 'guitarra'.

Ahora su generosidad ha permitido a Mary educar a sus hijos en colegios privados. Mary Austin dice: "De alguna manera creo que a una parte de Freddie realmente le habría gustado la vida familiar, un hogar feliz e hijos. No sé qué tal habría sido como heterosexual. Al principio solía pensar que le había perdido por ser gay. Pero creo que aunque hubiese sido completamente heterosexual habría acabado perdiéndole por otra mujer, especialmente cuando llegó la fama. Las mujeres le seguían a todas partes, aunque sospechasen que era gay".

La proximidad de la pareja siempre causó problemas a los demás. Ninguno de los novios que tuvo Mary cuando dejó de vivir con Freddie en 1980 duró mucho.
Pronto se daban cuenta de que tenían que compartir el cariño de Mary con la estrella de rock y ese especial lazo de lealtad e íntima amistad jamás pudo ser penetrado por un recién llegado.

Incluso el padre de los dos hijos de Mary, el pintor Piers Cameron, acabó decidiendo que esta especial situación era demasiado y terminó desapareciendo de la vida de Mary por completo. "Siempre se sintió eclipsado por Freddie", dice Mary. "Fredie había ampliado tanto el horizonte de mi vida introduciéndome en el mundo del ballet, la ópera y el arte. Aprendí tanto de él y me dio tanto. De ninguna manera podría jamás abandonarle. Nunca".

Como otra forma de mantenerla próxima a él, Freddie creó un trabajo para ella, haciéndola secretaria de su empresa discográfica. Tras su muerte, le llevó a Mary mucho tiempo hasta que aceptó que Freddie había salido definitivamente de su vida.

Cinco años tuvieron que transcurrir hasta que fue capaz de dormir en su enorme dormitorio amarillo. Antes se había sentido incapaz de tocar nada en esa habitación. "Había pasado tanto tiempo con él estando enfermo y había tantos recuerdos en aquella habitación. Recuerdos de él sufriendo. Sólo veía este hombre tan frágil, tumbado en la cama y recordaba todas las pequeñas cosas que solía hacer por él. Como peinar su pelo, por ejemplo".

"En aquella época realmente sentí tanto amor por él. Esos eran los momentos que recordaba cada vez que miraba a su cama. Me sentaba todos los días junto a su cama durante seis horas, tanto si estaba despierto como si no. A veces se despertaba de repente, sonreía y me decía "oh, eres tú, vieja fiel".



Fuente: Daily Mail (Enero 1999)
Archivo imágenes: Fred Mercurio

jueves, 15 de septiembre de 2011

Freddie Mercury y Mary Austin

Hablar, comentar y opinar sobre la relación que mantuvo (a partir que la conoce) a todo lo largo de su vida, Freddie Mercury con Mary Austin, da para mucho mas que un post en un blog, por lo que pienso publicar mas información sobre esto en el transcurrir de los días, que espero ayude a despejar muchas dudas acerca de esto, ya que existen fanáticos que opinan que fué una relación oportunista y otros que una relación basada en la verdad, respeto y fidelidad.

Freddie Mercury conoce a Mary Austin a principios de la década de los setentas (70s), cuando ella tenía 19 años de edad, al parecer el que los presenta es el guitarrista de Queen (que en ese entonces, la banda aun no tenía ese nombre) Brian May, justamente cuando discutían e intentaban poner un nombre a la banda, Brian quería que se llamase "Build Your Own Boat" (algo así como "construyendo nuestro bote") y Freddie "Queen"; Mary Austin dijo en una entrevista: "Recuerdo la melena negra de Freddie, que le hacía parecer un caballero, con su brazo apoyado sobre la repisa de la chimenea de la casa de Brian en Barnes. Estaba muy orgulloso de sus nuevos zapatos blancos. De repente se volvió hacia mi y me pidió mi opinión sobre los nombres. Dije "oh, creo que Build Your Own Boat de Brian".

Pero al final, como siempre Freddie se salió con la suya y la banda se llamaría QUEEN.

Mary hasta entonces había llevado una vida de privaciones. Sus padres eran pobres. Su padre trabajaba como recortador para especialistas en empapelados. Y su madre una empleada de hogar para una pequeña empresa. Ambos eran sordos y se comunicaban a través del lenguaje de los signos y leyendo los labios. Mary abandonó la escuela a los 15 años. Su primer trabajo fue como aprendiz de secretaria con Remingtons, ganando 5 libras a la semana.
Posteriormente alcanzó el puesto de relaciones públicas con los clientes en la tienda Biba en Kensington. Fue cuando trabajaba en Biba cuando conoció a Freddie y Roger Taylor, quienes tenían un puesto en el cercano mercado de Kensington, en el que vendían ropa usada y algunos trabajos artísticos de Freddie.



Mary Austin cuenta que la presencia de Freddie era bastante intimidadora, ella inmediatamente se sintió fascinada por el, como cuenta en una entrevista: "este músico artístico de aspecto salvaje, no se parecía a nadie que hubiese conocido antes. Tenía mucha confianza en sí mismo, y yo nunca la había tenido. Maduramos juntos. Me gustaba, y todo progresó a partir de ahí".

Luego comenta: "Me llevó unos tres años enamorarme realmente de él. Pero nunca había sentido eso antes por nadie".

Al principio compartieron una habitación de 10 libras a la semana en Victoria Road, Kensington. "Teníamos tan poco dinero entonces que sólo podíamos permitirnos un par de cortinas, así que las colgamos en el dormitorio. Teníamos que compartir el baño y la cocina con otra pareja".



Un par de años después se mudaron a un piso más grande en Holland Road, que les costaba 19 libras a la semana. Por aquel entonces la banda QUEEN ya había firmado un contrato discogáfico, y las fotos para el primer album se tomaron en aquel piso.

Fue en un concierto celebrado en el Ealing College of Art, cuando Mary reconoció por primera vez su calidad de estrella: "Cuando bajó del escenario todas las chicas y sus amigos se agolpaban a su alrededor"; recuerda. "Estaba tan ocupado que pensé 'no creo que me necesite ya'. Ya me iba cuando llegó corriendo hasta mi. Me dijo '¿a dónde vas?', le dije: me voy a casa".

Mary Austin cuenta: "Las cosas habían cambiado para él y para el grupo. Freddie era tan bueno sobre el escenario, diferente a cualquier cosa que hubiese visto antes, como si fuese algo para lo que él se había estado preparando. Por primera vez sentí 'aquí está una futura estrella. Está en su camino. No creo que me necesite nunca más'. Me aparté. Conforme todo progresaba pude verle florecer. Era algo maravilloso de observar. No me sentí triste ni molesta. Estaba feliz de que por fin lo estuviese consiguiendo gracias a su talento. Él no me dejaría marchar. Aquella noche me di cuenta de que yo también tendría que ser parte de ello. Realmente fue emocionante ver como todo ello ocurrió; yo estaba feliz y orgullosa de que él quisiera estar conmigo".

"Me sentía muy segura con él. Cuanto más le conocía más le quería. Tenía calidad como persona, lo cual creo que es muy raro hoy día. Algo que siempre fue constante fue el amor. Sabíamos que podíamos confiar el uno en el otro, y nos sentíamos seguros juntos. Sabíamos que nunca ninguno de nosotros haría daño al otro a propósito. Una vez, en Navidades me compró un anillo y lo puso dentro de una caja enorme. Íbamos a visitar a sus padres el día de Navidad. Abrí la caja, y dentro había otra caja, y así sucesivamente hasta que encontré aquella caja diminuta. Cuando la abrí allí estaba aquel hermoso anillo egipcio de escarabajo. Se supone que trae buena suerte. Fue muy dulce y tímido cuando me lo dio".



Y fué así que sucedieron muchas cosas e historias a lo largo de sus vidas. A mediados de los 70s Freddie tendría un affaire con un ejecutivo de Elektra Records, que a la larga terminaría con la relación que tenía con Mary Austin.

Pero aún así, Freddie y Mary mantuvieron una muy cercana amistad a lo largo de los años, Freddie Mercury se refería a Mary como: "su única amiga de verdad".
En una entrevista de 1985, afirmó: "Todos mis amantes me preguntan por qué no puedo reemplazar a Mary Austin, pero eso es sencillamente imposible. La única amiga que tengo es Mary y no quiero a nadie más. Para mí, ella es como una esposa. Para mí era como un matrimonio. Confiamos en el otro, eso me basta".

Muchas canciones compuestas por Mercury están inspiradas en la relación que vivió con Mary. Mercury además fue el padrino del hijo mayor de Austin con Piers Cameron: Richard.

jueves, 8 de septiembre de 2011

65 años del nacimiento de Freddie Mercury

Cierto, el 5 de septiembre de 2011, se conmemoraba el 65 aniversario del nacimiento de Farrokh Bulsara, en la isla de Zanzíbar, Tanzania, es decir si estuviese vivo tendría esa edad, y sabe Dios los temas nuevos que hubiese compuesto, por que era un compositor genial, con gran talento.

Esta fecha (la del nacimiento de Freddie) marca mi retorno a las lides bloggeras, en el que, claro, con algo de tiempo y las ganas que inspira la temática y el personaje sobre el cual se piensa disertar y reflexionar, va a tener que funcionar.

Con las disculpas a los lectores de este humilde blog, este servidor fan mercuriano y Queenero convicto y confeso, retorna a las andadas virtuales...

Como ya es mundialmente conocido Mercury nació en el entonces protectorado británico y actualmente parte de Tanzania, en el año de 1946. Sus padres, Bomi y Jer Bulsara, eran parsis de la región de Gujarat, parte de la Presidencia de Bombay en la India Británica.
El apellido de la familia se deriva de la ciudad de Bulsar (conocida también como Valsad), en el sur de Gujarat.

Siendo parsis, Mercury y su familia practicaban la religión zoroástrica y estaba orgulloso de su ascendencia persa.
La familia Bulsara se había mudado a Zanzíbar debido a una orden recibida por su padre en su trabajo en La Oficina Colonia Británica.

Mercury tenía una hermana menor, llamada Kashmira.


La casa en donde nació Freddie Mercury

Creo que todos los fan de Freddie, de una forma u otra, recibieron la feliz noticia del homenaje que le hizo Google al gran Freddie Mercury...



Saludos